miércoles, 8 de enero de 2014

Disidente

Veo como pasa el tiempo frente a mis ojos, y no intento detenerlo.
¿Debería? Probablemente no, no es mi estilo. Y realmente no tengo estilo. Ese vago intento de unirme al resto de cierto modo quedó atras en el minuto en que comprendí que, mientras intentaba encajar, el tiempo corría más rápido, y más rápidamente me volvía un montón de cenizas.
¿Por que es tan difícil ser una misma? TODOS se sienten con el derecho a juzgar cada cosa que haces, y cuando quieres devolverles la mano, notas que estás convirtiéndote en uno de ellos...y ya no quieres encajar.
Después de eso, eres una paria.
El respeto desaparece tan velozmente, y sientes que ya nada importa más que los demás.
Te derrumbas y crees que todo acabó porque un par de personas ya no te consideran "parte de ellos".
Pero eso no tiene nada de malo. Ahora eres una persona nueva.
Podemos aprender cosas completamente diferentes a las que aprenderiamos con ellos.
Ser disidentes no es nada de lo que debas avergonzarte. Tener tus propias ideas debería hacernos orgullosos, pero, como siempre, la mayoría de los disidentes se vende...
Y quedamos enfrascados en el exilio, muchos en el auto rechazo.
Todo por pensar diferente.

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